Entrevista con Andrés San José. Presidente de la Junta Local de Semana Santa
20 noviembre 2005
«Para conservarlos hay que evitar movimientos bruscos»
EL presidente de la Junta Local de Semana Santa de Medina de Rioseco cree que, en la conservación de las tallas, las diferentes cofradías se «preocupan hasta el grado que pueden hacerlo, puesto que la mayoría de los pasos están dados en custodia al Museo de Semana Santa. Por tanto quien debe ocuparse de ese aspecto, y hasta un punto así lo hace, es el museo. Al estar abierto al público, las piezas deben de tener unas condiciones adecuadas. Esta labor antiguamente correspondía a una figura dentro de la cofradía que era el muñidor, quien se encargaba del mantenimiento y cuidado de los pasos, pero esta circunstancia ha variado», indica.
-Los expertos afirman que muchos daños se producen porque los pasos se llevan a hombros
-No sufren tanto por llevarse a hombros como por determinadas cosas que se hacen cuando procesionamos los pasos, puesto que cuando se hicieron, fue para llevarlos de esta manera para que estuvieran en movimiento. Lo que hay que evitar son los movimientos bruscos y las situaciones preocupantes como subir los pasos por escaleras, hacer bailes desacompasados o la famosa ‘rodillada’.
-¿Sería aconsejable cuestionar tradiciones como la ‘rodillada’ en beneficio de las propias tallas?
-El efecto que produce en las tallas, según los expertos, es muy perjudicial porque es un golpe brusco. Por tanto, es algo que todas las cofradías deberíamos tener muy en cuenta y pensar que las tallas tienen dos o tres siglos y con el paso del tiempo se van deteriorando. Es indiscutible que procesionar los pasos a la manera de Valladolid o Zamora tiene menos riesgos para las tallas que como lo hacemos en Rioseco. Es nuestra forma de expresar nuestros sentimientos, pero hay que conjugar eso con el mantenimiento y la conservación de las tallas.
-Además del convenio entre la Junta de Cofradías y el Gobierno regional, ¿qué actuaciones se realizan para conservar los pasos?
-Fundamentalmente todo gira en torno a este convenio, se sufraga al 50% entre la Junta de Castilla y León y la cofradía cuyo paso se restaura. Desde el año pasado periódicamente solicitamos la visita de los técnicos de la Consejería de Cultura para que vean el estado de aquellos pasos cuyas cofradías creen que tienen algún problema, para que hagan su diagnóstico. En el caso en el que sea alguna talla que no tenga cofradía, la Junta hace un esfuerzo mayor en la subvención.
-¿En esa línea se va a restaurar el Cristo de la Clemencia?
– Sí, era un Cristo que ya desfilaba antes el viernes por la mañana y que ahora pensamos recuperar para una nueva procesión el lunes o martes, junto a la Virgen de la Cruz.
-Texto y fotografía: El Norte de Castilla. Pilar Pérez Salán